Lo que antes eran jardines con flores, aves y mariposas, ha pasado a convertirse en ranchos levantados de un día para otro con tablas y plásticos. Un pantanero. Una invasión. De nuevo el Morro del barrio Moravia es tierra de nadie, terrenos públicos lotiados por grupos ilegales. Detrimento de escenarios para el disfrute ciudadano. Retroceso en la transformación urbana que vivía la ciudad.
Todo esto sucede en una zona céntrica de Medellín, ante los brazos cruzados de la Alcaldía de la ciudad que, en manos de Daniel Quintero Calle, ha dejado que se acentúe un fenómeno de pérdida del espacio público que ya venía desde de la alcaldía de Guillermo Gaviria Correa, que se acrecentó con la alcaldía de Federico Gutiérrez y que en 2021 empieza a salirse de control.
La denuncia ya viene corriendo desde las bocas de ciudadanos desesperados por la situación. Se indica que al menos 400 personas pertenecientes al grupo denominado Primera Línea, invadieron jardines de este sitio de la ciudad y están amenazando con la desaparición del vivero que está situado en la cima.
«Denunciamos a la Primera Línea que se ha tomado al morro de Moravia, especialmente La Compostela. Hoy la Primera Línea nos invade el territorio y desplazan a unos jardineros que han venido trabajando hace más de ocho años en el territorio», dijo un habitante del sector.
Entre 1977 y 1984 el Morro de Moravia fue el basurero municipal, pero con la intervención que realizó el entonces alcalde, Sergio Fajardo, y que se mantuvo durante la alcaldía de Alonso Salazar, el lugar adquirió un aspecto renovado, celebrado y reconocido en el mundo entero, con jardines que eran cuidados por habitantes del mismo sector. En la cima incluso se instaló un vivero.
Todo esto se está viniendo abajo. En parte por la falta de ejecución de la alcaldía de Alonso Salazar, que no logró reubicar a las últimas familias que se quedaron en el Morro, aunque se les ofrecieron los recursos para que se instalaran en otros lugares de la ciudad. Hay que reconocer que el proceso quedó incompleto y eso facilitó la problemática que justo ahora empieza a reventar.
Lo más escandaloso es que la Alcaldía de Medellín parece haber perdido toda esperanza de intervenir de nuevo el territorio, según se desprende de la entrevista que dio a Caracol Radio el Secretario de Gestión y Control Territorial, Carlos Mario Montoya.
En dicha entrevista, el secretario confirma que no se han podido realizar los desalojos y que «cualquier tipo de acción que muestre un poco de fuerza puede ser mal interpretada». También dice que no se les pueden ofrecer alternativas de vivienda a cualquier persona que levante un rancho. Reconoce también que el territorio está siendo loteado por organizaciones criminales, pero no explica qué acciones se están realizando contra estas organizaciones. Lo que dice es que «judicializar a estas personas se va volviendo difícil a veces»
Cabe entonces preguntarse: ¿Se perderán totalmente los avances de la transformación del Morro de Moravia durante la Alcaldía de Daniel Quintero Calle?