Ciudadanos de Medellín hablan sobre desplazamiento forzado intraurbano

El Museo Casa de la Memoria impulsa un Laboratorio con encuentros virtuales de conversación y creación artística en torno a un fenómeno desgarrador: el desplazamiento forzado intraurbano en la ciudad de Medellín. ¿Qué opina usted sobre esta problemática? Lluvia de Orión le invita a participar.

Por: Deysi Flórez Álvarez

 

El primer encuentro virtual celebrado entre ciudadanos de Medellín, como parte del Laboratorio Transmedia Ciudadano sobre Desplazamiento Forzado Intraurbano, se celebró el pasado viernes 13 de noviembre de 2020 entre las diez de la mañana y las doce del mediodía.

Participaron 38 ciudadanos entre los 18 y 65 años de edad, con estilos de vida y oficios diversos.

Había historiadores, filósofos, antropólogos, psicólogos, trabajadores sociales, gestores culturales y personas de otros campos, como la ciencia política, la pedagogía, la bibliotecología, la ingeniería ambiental, las artes plásticas, la música y la comunicación.

Entre todos había un interés en común: tratar de entender un poco más este fenómeno que hoy padecen cientos de personas en la ciudad de Medellín: el desplazamiento forzado dentro de las fronteras de la misma ciudad.

Adriana Arboleda, directora de la Corporación Jurídica Libertad, compartió parte de su visión de este fenómeno que, según ella, se empezó a reconocer como delito solo en los años recientes. Así estaba de naturalizado. Y parece que sigue asumiéndose en la ciudad de Medellín como algo normal e inevitable.

El laboratorio, que se prolongó durante dos horas, se convirtió en un espacio de creación y diálogo ciudadano en el que se propiciaron intercambios de experiencias y conocimientos previos.

Algunos hablaron de las diferentes causas del desplazamiento forzado, entras las que estaban las obras de infraestructura que cambiaban algunas áreas de la ciudad y forzaban el desarraigo entre vecinos que habitaban allí durante muchos años. Otros mencionaron un tipo de desplazamiento forzado que se genera por los movimientos de masas en zonas de alto riesgo. Y también se habló de los desplazamientos forzados por las empresas, quienes exigen a sus empleados que cambien de domicilio para poder darles un contrato.

Se habló de la persona desplazada forzosamente no solo como una víctima, sino también como alguien que resiste y lucha por salvaguardar su vida, la propia y la de sus seres queridos. Aunque para ello implique moverse a rehacer su vida en otro rincón de la ciudad.

Fueron visiones importantes, pero la abogada Adriana Arboleda volvió a llamar la atención sobre un hecho indiscutible: que la persona desplazada forzosamente es una víctima a la que se le afectaron sus derechos, y se requiere justicia para ella.

A través de la palabra dulce, la palabra comprometida con la escucha del otro, con el respeto, con la tolerancia, los 38 participantes se fijaron como meta más posibilidades de no violencia, más visión de ciudad para entender las realidades que se vienen presenciando cada día y que han incrementado debido al exponencial  fortalecimiento de distintos grupos armados al margen de la ley.

Al continuar el diálogo se evidenció que el fenómeno del Desplazamiento Forzado Intraurbano [DFI], aqueja y victimiza a parte importante de la población medellinense. Fue de suma importancia diferenciarlo del Desplazamiento Forzado [DF]. La particularidad reside en que en esta subcategoría el municipio expulsor es el mismo que el receptor, de manera que una persona o familia al estar amenazada, busca protección en otro barrio o sector. Esto lo hace menos visible, pues  el hecho de que sea “gota a gota”,  de manera individual, genera menos rastreabilidad; es en las cifras donde se puede afirmar que la problemática es sistemática y estructural.

En todo momento hubo preocupación por la normalización del fenómeno.

Según los datos de la Red Nacional de Información, hasta el 1 de noviembre de 2020 en Colombia han sido reconocidas 9.057.952 víctimas del conflicto armado, siendo el desplazamiento forzado el hecho victimizante que más declaraciones presenta, con 8. 070.112 declaraciones. De estos, 1.823.218 corresponden al departamento de Antioquia.

En el caso de Medellín, desde junio de 2020 el fenómeno viene en aumento, aunque en este año se tienen menos afectaciones que en 2019.

Para terminar el conversatorio, se propuso un ejercicio para los participantes: grabar un video donde la persona responda a la siguiente pregunta: ¿Por qué es importante hablar de desplazamiento forzado intraurbano en la ciudad de Medellín?

Algunas personas ya han empezado a enviar sus videos.

 

Si usted, amigo/a lector/a, quiere responder a este pregunta y enviarnos su video, puede hacerlo en el correo lluviadeorionsocial@gmail.com. Con gusto lo recibiremos para la creación de un video colectivo.

Entonces, siendo Antioquia el departamento que más casos presenta en todo el país, ¿por qué es un tema que pocos mencionan?, ¿cuál es el pensamiento general que se tiene sobre el desplazado?, ¿cómo es el estilo de vida?, ¿cuáles son las comunas de Medellín en que vive más población desplazada?, ¿en qué comunas se genera más desplazamiento forzado?, ¿por qué si es repetitivo hay tanto silencio en la estatalidad respecto al fenómeno?, ¿por qué las mujeres son afectadas en mayor número que los hombres por el DFI?, ¿dónde quedan los testimonios de las comunidades resilientes, resistentes?, ¿se debe hablar de desplazamiento o desplazamientos? ¿cómo podemos visibilizar la problemática?, estas y muchas más preguntas, continúan alimentando nuestro Laboratorio Transmedia Ciudadano sobre Desplazamiento Forzado Intraurbano en Medellín.

Nuestra conversación y creación continuará el próximo viernes 20 de noviembre del 2020 de 10:00 a 12:00. Anímate a ser parte de este diálogo ciudadano.

Inscripción previa: https://forms.gle/iNmC9Zt8Cr7MbwNJ9

Enlace de Meet: https://meet.google.com/kfs-cegm-eky