Por: Redacción Lluvia de Orión
“Mermelada diplomática”. Así describió el senador Antonio Sanguino, del Partido Alianza Verde, la entrega de cargos diplomáticos a personas afines al Centro Democrático sin ninguna experiencia académica ni profesional en el ámbito de la política exterior.
En un debate desarrollado por la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso, se hizo control político a quien era en ese momento el ministro de relaciones exteriores: el recientemente nombrado ministro de defensa, Carlos Holmes Trujillo.
El senador Sanguino expresó que para tener un cargo diplomático basta con cumplir con alguna de las siguiente características: “Ser amigo del presidente, ser uribista, ser excandidato del Centro Democrático, haber hecho parte de su campaña o la de Marta Lucía Ramírez y no tener experiencia en cargos diplomáticos”.
“Los nombramientos de personal de la carrera diplomática está en el 28%, pero los nombramientos con criterios políticos siguen estando en el orden del 72%, que nos parece un asunto que atenta contra la meritocracia en el servicio exterior”, expresó el senador.
¿Ministerio comprado?
En total serían 104 nombramientos injustificados.
Según senadores de la oposición, muchas de estas personas son ex candidatos al Congreso por el Centro Democrático que no alcanzaron una curul, pero que el Gobierno premió con cargos que deberían ser ocupados por funcionarios de carrera diplomática, es decir, personas que trabajan hasta 25 años en el ámbito de la diplomacia para llegar a ser embajadores.
Incluso, el Gobierno de Iván Duque nombró a personas que financiaron su campaña.
El caso más delicado tiene que ver con la mujer que va a reemplazar a Trujillo en el cargo de canciller. Se trata de Claudia Blum, una veterana política de las entrañas del uribismo.
Blum donó 80 millones de pesos a la campaña de Iván Duque.
Su esposo, su cuñado y su concuñada, donaron también 80 millones cada uno. Muchas personas han alertado el juego de intereses en relación a la nueva canciller.
Otros nombramientos
La esposa del expresidente César Gaviria, un hijo del uribista Fabio Valencia Cossio, varios candidatos del Centro Democrático que se quemaron en las elecciones, e incluso personas que no dominan el idioma inglés, fueron nombrados por Carlos Holmes Trujillo para representar a Colombia en el exterior.
El representante a la Cámara de la lista de los Decentes, David Racero, denunció el nombramiento irregular de una hija de la dirigente conservadora Noemí Sanín. Según el representante, este nombramiento fue injusto por cuanto había dos funcionarios con experiencia listos para ocupar el cargo.
“Víctor Echeverri y Jairo Abadía, son actualmente empleados de la Cancillería, hicieron carrera diplomática y estaban disponibles para ocupar el cargo que Carlos Holmes le asignó a María Jimena Durán Sanín, hija de la dirigente conservadora Noemí Sanín. Ese caso de mermelada y clientelismo lo denuncié y el pasado 26 de septiembre el tribunal de Cundinamarca falló en primera instancia la nulidad de la vinculación de Durán Sanín como Ministra Plenipotenciaria con funciones de Cónsul General en Londres, dándonos la razón”, contó el representante.